noviembre 04, 2016

Colección Novelas Gráficas DC. Batman: Una Muerte en la Familia.


Calificación personal del cómic:
 5/5

Editorial: ECC Ediciones (distribuidora de DC Comics en España), enmarcada dentro de la Colección Novelas Gráficas de Salvat.

Autores: Jim Starlin (guión), Jim Aparo (dibujante)

Sinopsis: La historia que dio la vuelta entera a la vida de Batman. Un nuevo caso para el Dúo Dinámico, un joven Robin con ansias de descubrir la verdad, una trampa hurdida milimétricamente por el Joker. Y un desenlace trágico sometido a elección ciudadana.





Corrían los días finales de 1988 cuando DC se planteó una alocada pero astuta idea:
¿Por qué no conocer de una santa vez a la madre perdida del solitario Jason Todd? ¿Por qué no un cómic en el cual se viera y supiera de dónde carajos venía toda la rabia del segundo Robin? Y, sobre todo, ¿por qué no hacer que nuestros amados lectores decidan sobre el futuro del personaje llamando a la editorial y que sean ellos, con sus votos, quienes decidan si vive o muere?
Y así surgió esta historia de cuatro números en la cual un rebelde Jason Todd es relegado de sus labores de Robin debido a sus malos comportamientos y su manía de ponerse en peligro y demasiado riesgo, lo que no concordaba con la habitual metodología de Batman ni con su regla de "NO MATAR". En su vuelta a casa por el vecindario, una mujer le da una carpeta con unos papeles en los cuales, supuestamente, está el nombre de su verdadera madre. Y digo supuestamente, porque lo único visible en dichos papeles es su certificado de nacimiento y las iniciales S y C de los nombres.
Mientras tanto, nuestro psicópata favorito escapa de Arkham una vez más (en serio, Arkham, tenéis un problema de seguridad muy gordo, hacéroslo mirar...) y roba un arma nuclear con la idea de venderla a unos terroristas. Otro precioso día en la vida del Joker, y qué feliz es él robando, matando y echando cosas a volar por los aires. Ay, este maníaco...
En ese momento, Batman viaja al Líbano donde se encuentra con un Jason que buscaba a la primera posible madre, Sharmin Rossen, quien niega serlo.
Posteriormente, encontramos a la segunda candidata. Ni más ni menos que nuestra amiga asesina, Lady Shiva, quien irónicamente desmiente toda posibilidad de ser la madre de Jason.
Y a partir de aquí, el viaje a Etiopía. Nos podemos decir más, pero sí os contaremos que esa posibilidad que abrió DC de votar si el personaje vivía o moría fue todo un escándalo de participación y un éxito de crítica (aunque en honor a la verdad, también se llevó incontables palos).
Y el resultado de la votación es... NO. Leed el cómic, malditos aficionados a los spoilers.

EXTRAS: Portadas alternativas de los cuatro números y Batman #366, con la primera aparición de Jason Todd como Robin.

2 comentarios:

  1. Hoooola guapetones!

    Por fiiin puedo comentaros por blogger. Blogger la lía él solito, a veces pienso que tienen a los de 'dos tontos muy tontos' trabajando ahí.

    Vale, vais a tirarme gominolas, pero no tenía ni idea de la existencia de este cómic. Pobre Robin. Eso sí, los de DC se lo han currado para hacer valer la expectación, a nivel promocional, incluso antes de que el ejemplar saliese a la luz.
    Si ya de por sí, lo de los papeles huele a chamusquina a kilómetros. En serio, esta serie no me la he leído, pero vamos, pa' no verlo. ¿Qué le pasa por el colondrio a este Robin?

    Lo de Arkham... en fin. Eso no es una prisión, sino más bien una fiesta de Pocholo, porqué sinó no se entiende.

    Un saludo!! ♥

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    1. ¡Hooola Hydre! Lo primero de todo... ¡Perdón por la respuesta tardía!
      Lo de la muerte de este Robin fue un pelotazo enorme que se sacaron de la chistera los de DC, dando pie a posteriores insinuaciones y rumores sobre si de verdad habían sido capaces de eliminar a ese personaje o era una realidad alternativa.
      Hasta aquí puedo leer sin spoilear la segunda parte de esta entrada.
      Y en Arkham... Bueno, es lo que pasa cuando tienes a tanto villano junto y los tratas como animales. Digamos que las fugas del Joker son lo más light que puedes ver en Arkham, no tienen sus trabajadores un historial impoluto en el tratamiento de sus presos. Aun así, sí, las paredes parecen de papel.
      ¡Un saludo grande y gracias por comentar!

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